David Coulthard ha estado a punto de quedarse
sin butaca para la próxima temporada de Fórmula 1. Después
de muchos años en la escudería McLaren, el escocés
pilotará en 2005 para el Red Bull Racing, el equipo formado tras
la compra de las acciones de Jaguar por la firma austriaca Red Bull.
Tras unas semanas de incertidumbre, Coulthard afronta ahora con mucha
ilusión este nuevo reto.
«No voy a hacer ningún pronóstico, pero sí
que creo que vamos a ser mucho más competitivos de lo que mucha
gente cree», afirmó Coulthard en declaraciones a la BBC.
«Estoy seguro de que sorprenderemos a más de uno en la
parrilla de la próxima temporada», añadió.
El veterano piloto escocés probó su nuevo monoplaza a
principios de diciembre en Jerez. «Todo lo que he visto hasta
ahora me ha parecido muy positivo y los desarrollos que sé que
tiene previstos el equipo parecen realmente prometedores», agregó
Coulthard.