La verdadera historia de la creación de
la bandera y el himno de la provincia

Los símbolos de este Neuquén que llevamos en el corazón y la mente, porque nos representan, están consustanciados con las características propias del ser neuquino y de su hermosa “patria chica”.
Ellos son su Bandera Provincial, que flameara por primera vez en la histórica “Plaza de las Banderas” del “Parque Centenario de la Conquista del Desierto” mucho antes de la remodelación realizada este mismo año.

Veinticinco años atrás
En ese mismo lugar fue entonado el Himno Provincial en el acto del 11 de junio de 1979 en que se inaugurara esa hermosa plaza.
El pueblo neuquino fue convocado con el marco de las diecinueve banderas representantes de las Unidades del Ejército Nacional. Además las siete banderas que recordaban a las compañías de Indígenas Auxiliares que colaboraron en aquella épica campaña y las cuatro unidades de la Marina de Guerra que habían hecho posible la conquista y ocupación de las quince mil leguas que constituyeron, sin duda alguna, el principio de la reorganización de la República, constreñida hasta entonces en parte del territorio de las diez antiguas provincias firmantes de la Constitución Nacional de 1853, que no abarcaba más que una tercera parte del actual territorio continental argentino.
Allí, al costado Este donde flameaban las treinta y tres banderas, se encuentra la plazoleta que fue inaugurada un 28 de noviembre, recordando el natalicio del insigne maestro y doctor neuquino don Gregorio Álvarez. ¿Cómo olvidar ese sitio tan lleno de recuerdos de quienes hicieron posible nuestro Neuquén y de aquellos que la engrandecieron?

Himno y bandera
Por decreto 0563 del 29 de febrero de 1989 se llamó a concurso para la selección del diseño de la Bandera Provincial y de la letra y música que constituirían el Himno Provincial. El Jurado para la elección de la Bandera estaba conformado por veinticinco personalidades de Buenos Aires, Neuquén y el interior de la provincia. El jurado para la selección del Himno estaba integrado por dieciocho personas, de las cuales nueve participaban también del jurado que elegía la bandera. Por decreto 2764 del 23 de agosto se aprobó la letra del himno compuesta por nuestros vecinos Osvaldo Arabarco y Marcelo Berbel, y por decreto 2766 del mismo día el diseño de la Bandera Provincial presentada por otro residente neuquino ,don Mario Aldo Mástice, conocido autor del escudo provincial y el municipal.
Mástice tomó los colores de la bandera argentina y con la misma sencillez que caracteriza a nuestro escudo provincial, que con anterioridad había diseñado, le copió y adaptó los símbolos: el volcán Lanín, el pehuen y el río, agregándole la estrella federal símbolo de una nueva hermana, Neuquén, que se agregaba al concierto de las viejas y nuevas provincias argentinas.

Música para Neuquén
Por el decreto 2765 se había declarado desierto el concurso para la música del himno, procediéndose a designar a los músicos Miguel Ángel Barcos y José Luis Bolea, para que junto con los autores de la letra: Arabarco y Berbel, procedieran a la adaptación y armonización de la música escrita por Marcelo Berbel, ya que la original canción “Neuquén Trabun Mapu” que Arabarco transmitiera desde sus audiciones en L. U. 5 Radio Neuquén, tenía una cadencia rítmica lenta, diferente a las clásicas canciones patrióticas que se entonan en los actos escolares.
Esta música aprobada por la Ley Nº 1932, no se impuso en el ambiente oficial ni en las escuelas, resolviéndose por Ley Nº 2335, del 26 de octubre del 2000 consagrar como himno provincial la composición poética “Neuquén Trabun Mapu” de Arabarco y Berbel y la versión de la música original de este último.
Por otro lado, la canción Quimey Neuquén era bien conocida por el público neuquino y nacional, pues había sido grabada por notables conjuntos y cantores del país y era común escucharla en festivales y reuniones folklóricas.
La grabación que hicieran “Los Mellizos Pehuenches” con Milton Aguilar nos sigue emocionando y retrotrayendo a un pasado no lejano en que compartíamos muchas ilusiones.
A sus dos autores, Milton y Berbel, esos recordados amigos, se los llevó el Señor dejándonos el imborrable recuerdo de muchas reuniones, viajes, actividades y acciones compartidas, porque también nos unían muchos sueños y esperanzas en un Neuquén de paz y trabajo, así como un porvenir mejor para nuestros paisanos del interior, especialmente aquellos que vivían en las agrupaciones indígenas.
A Dios gracias seguimos teniendo aquí con nosotros a Mástice y Arabarco, vecinos de la ciudad, a quienes vimos crecer desde niños y todavía podemos gozar de su afable y cordial compañía, ya que también con ellos nos une ese mismo sentimiento de amor por esta tierra y por su gente.

(*)Miembro de la Academia Nacional de la Historia.

Canción oficial del Neuquén

Por la Ley Nº 1933 del 13 de noviembre de 1991 se consagró como canción oficial del Neuquén a la canción popular titulada “Quimey Neuquén” escrita por Milton Aguilar y con música del ya mencionado Marcelo Berbel. Para quienes no posean su letra se la transcribimos: “Flor de los arenales / regada en sangre del bravo Saihueque / grito que está volviendo / en tu desbocado potro pehuenche. // Del cielo en la honda noche / se oye del viento, la serenata, / tupos la luna prende / en la negra cimba de mi araucana. // Sol que se está gastando / en piedras lajas y turbias corrientes, / besa la sombra india / que vuelve crecida de un sueño verde. // Ya madura el silencio / por el agreste vientre de tus bardas, / quiere Rayen dormirse, tiemblan sus entrañas enamoradas. // Aguas que van… quieren volver… / aguas que van, quieren volver, / río arriba en el canto aprendido / Neuquén Quimey, Quimey Neuquén.

Himno para actos oficiales

Al reglamentarla en el año 2000 el Poder Ejecutivo estableció que en los actos oficiales se cantaran los párrafos primero y segundo y el estribillo.
Es decir que se canta: Primer párrafo: “Creció en el compromiso de una raza vigente / Con el cielo en los lagos, todo el viento en la voz./ Con una fe de siempre nutriendo primaveras / Y un paisaje de tiempo que lo llenó de amor.” // Segundo párrafo: “Se bautizó en la gloria del agua cristalina / Venida de la nieve, divino manantial; / Y en la pehuenia madre nació su flor extraña / Que al soñar lejanías echó la vida a andar. “
// Estribillo: “Neuquén es compromiso / Que lo diga la Patria / Porque humilde y mestizo / Sigue siendo raíz. / Del árbol esperanza / Maná cordillerano / Que madura Nguilleu / El fruto más feliz. Y su tahiel mapuche / Hoy le canta al país / Neuquén, país, país.