Por JUAN MARIO RAONE (*)
Vida y acciones de esos heroicos sembradores del alfabeto
que llegaron antes del glorioso 12 de septiembre de 1904 a la incipiente
nueva capital.
Al releer artículos, apuntes, notas y folletos sobre las viejas
escuelas de esta capital, advertimos en los escritos algunas discrepancias,
ignorancia de datos precisos, omisiones y diferentes fechas referentes
a los primeros educadores que “sembraron” el alfabeto.
He notado que algunos informes que aparecen en las publicaciones del
Cincuentenario y otras de relevancia, como “Recuerdos Territorianos”
del prestigioso periodista y primer Gobernador electo don Ángel
Edelman, no concuerdan en sus informaciones y de allí que artículos
recientes, que evidentemente han sido escritos tomando datos de ellos,
nos traen fechas y hechos que no se condicen con los antecedentes
que obran, ya sean oficiales o de información de los propios
protagonistas.
Escuela de La Confluencia
El 4 de marzo de 1901 fue designado don Ángel Roca como Director
de la escuela a levantar en “la Confluencia”, pero tal
medida no se cumplimentó porque, según consta en el
Informe que el Subinspector J. Gregorio Lucero presenta el 28 de septiembre
de 1901 al Consejo Nacional de Ecuación: “En la Confluencia
no había niños ni casa disponible. Por cuya razón
debe dejarse sin efecto el nombramiento…”.
La primera escuela, según recordaba don Ismael Nordenstrom
funcionaba “en un galpón de paredes de chorizo y piso
de tierra” y había sido inaugurada en el año 1904
“el 10 de febrero con diez o doce alumnos”. Él
era uno de esos primeros alumnos que con sus compañeritos acudieron
a saludar al Ministro del Interior Dr. Joaquín V. González,
cuando vino para el acto protocolar de la fundación.
“En presencia del Inspector Díaz (se supone que ha sido
el 11 de febrero de 1904) se inaugura la primera escuela bajo la dirección
de don Eduardo Thames Alderete,…”
Don Ángel Edelman en”La educación local. Primeros
maestros.” de su libro: “Recuerdos Territorianos”,
tampoco especifica la fecha de creación de la escuela y solamente
hace alusión al telegrama que le envía el gobernador
Bouquet Roldán al Inspector Díaz.
Con respecto al propietario de la casa, don Ángel apunta que
era propiedad de don Francisco Bueno, cosa que no coincide con el
informe que suministra al Consejo el referido Inspector, quien informa
la precariedad de todos los edificios escolares y la dificultad para
solucionarlos antes del invierno, apunta:” He aquí lo
que hice: // En Estación Neuquén – Alquilé
a los señores Linares y Cía. una casa compuesta de un
saloncito, un pequeño cuarto y cocina, por la suma de $ 30,
debiendo dichos señores blanquearla, poner piso de tabla, hacer
una letrina, componer las puertas y ventanas”
Interrogantes
Me surgieron varios interrogantes por lo que me apersoné a
la actual Escuela Nº 2 “Gral. Conrado E. Villegas”
en busca de mayores datos. Su actual directora Graciela Abecasis me
atendió con gentileza ; informándome que no tenían
documentación de aquella época y me mostró los
registros y copias de notas que existen en los archivos. Vimos así
que no había antecedentes de la vieja escuela, figurando solamente
que en l905 y 1906 dirigía el establecimiento de niñas
la maestra Julia Úrsula G. de Rodríguez Spuch, estando
en blanco otros datos y apareciendo don Pedro Soraire como director
en 1912, sin otras especificaciones
Hay que tener en cuente que en aquella época las escuelas territorianas
no tenían número y esto me lo confirma una vez más
la nota del Consejo Escolar que en 1911 recibiera don Pedro y en la
cual se lo cita solamente como director de la Escuela de Varones,
sin ninguna especificación de número. Según varias
de las notas periodísticas regionales citadas, en 1905, el
Consejo Nacional de Educación autorizó la apertura de
una Escuela para niñas, que funcionó en la primera cuadra
de la calle Rioja, que conocimos cuando vivía allí don
Urbano Ruiz y familia, cuya hija Yolanda R. de Gregori nos decía
que sus padres le comentaban que cuando compraron esa casa todavía
tenía escrita la aclaración de que allí funcionaba
la “Escuela de Niñas”.
En aquel entonces era el domicilio particular del Comisario de Policía,
cuya esposa: doña Úrsula G. de Rodríguez Spuch
era quien atendía al alumnado, contando con la colaboración
de la señorita Gumercinda Contente; luego actuaron Waldina
P. de Payeras y las hermanas Teresa y Rosario Bonet. Es conocido también
el hecho de que habiendo sido trasladado el maestro Eduardo Thames
Alderete, al comenzar las clases en 1905 fue reemplazado por don Aditardo
Figueroa Ozzan,
Como el edificio de adobes de la escuela estaba en terrenos que en
el trazado de la ciudad capital hiciera Bouquet Roldán correspondían
a la avenida Argentina, debió ser desocupado y tiempo después
fue demolido para dar paso a la construcción del tramo sur
de la avenida que ahora se llama Manuel José Olascoaga al 200.
Según Edelman, que concurría a esa escuela, al iniciar
el curso de 1906 la trasladaron al edificio ubicado en la esquina
de las calles San Martín y Santiago del Estero, donde por muchos
años supo estar “La Mascota”, edificio que pertenecía
a don Francisco Bueno.
Inauguración
Allí siguió funcionando hasta que el 15 de mayo de 1912
se inauguró el local de la Escuela en el triángulo de
Avenida Argentina, Diagonal Alvear y Carlos H. Rodríguez. Y
apunta que acompañaban a Soraire los maestros: “Srta.
Julia Romero, señor Emilio Guiñazú y señora
y Francisca Bonet de Castilla” La fecha disiente con la que
registra la Memoria del Ministerio del Interior 1911/12, a pág.
188, donde se informa al Congreso que fue habilitada en marzo de 1912.
Es la misma que en septiembre pasó a ser Escuela Superior Mixta,
al unificarse ambas escuelas, siendo su Director el nombrado Pedro
Soraire.
El 18 de septiembre de 1906 el Gobernador don Eduardo Elordi, en contestación
a lo requerido por el Ing. Carlos Gallardo, Director de Museos y Biblioteca
Pedagógica, le envía una nota haciéndole saber
cuáles eran las escuelas que entonces tenía el territorio,
especificando en una lista numerada la localidad o paraje del asiento
y el director o directora de cada escuela. El objeto perseguido era
que a las mismas se les enviaran libros para formar una biblioteca
escolar, lo que suponemos dio curso al envío de encomiendas
con tales destinatarios. Podemos observar que la mencionada lista
comienza con la escuela que dirigía don Aditardo F. Ozzan y
la sigue la que atendía doña Úrsula de Rodríguez
Spuch,
La falta de datos respecto a los inicios de la Escuela Nº 2 es
de vieja data, pues tenemos fotocopia de la nota que el recordado
Inspector General de Enseñanza Primaria de Neuquén,
don Ricardo Estévez, le enviara el 13 de agosto de 1964 a Pedro
Soraire, cuando éste, ya anciano, vivía en El Palomar
(provincia de Buenos Aires). Estévez solicitaba información
respecto de la creación de la Escuela Nº 2 , pues el único
antecedente que tenían era que en setiembre de 1912 había
comenzado a funcionar como Escuela Superior Mixta, siendo Pedro Soraire
su director.
(*) Miembro de la Academia Nacional de la Historia. Fotos
Sistema Provincial de Archivos.
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