Tenía calefacción el colectivo secuestrado

Neuquén > El colectivo que fue secuestrado por la municipalidad la semana pasada tenía calefacción pero tenía cerrada una de las llaves de paso de circulación del agua, según se constató en una inspección realizada el viernes a pedido de la jueza de faltas subrogante Mónica Acuña.
El vocero de la empresa Indalo, Ismael Infante, apuntó a la Municipalidad de Neuquén por endurecer los controles pero sin cumplir con los compromisos que asume frente a la concesionaria. “El Municipio dice que sale a poner mano dura a Indalo cuando, primero, debe cumplir como corresponde hacia adentro, porque al no hacerlo genera incertidumbre”, dijo Infante.
Indicó que el febrero de este año se firmó un acuerdo mediante el cual la empresa se comprometía a incorporar 6 unidades y a remodelar otros 10 colectivos. A cambio, la comuna debía instrumentar una compensación en la metodología de costos del 25 por ciento. “Cinco meses después nos dan una compensación del 15 por ciento, que no alcanza, porque se ha generado una deuda de 3 millones de pesos y la empresa debe hacerse cargo igual del mantenimiento de las unidades”, dijo Infante.

Sueldos
Recordó que el aumento fue, en gran parte, a paliar el desfase que produjo el incremento de sueldos de los choferes que desde que cayó la convertibilidad ascendió al 75 %.
“Esta seguidilla de cuestiones contractuales ha estado minando la calidad del servicio desde sus comienzos y es la causal fundamental de esta situación”, comentó el vocero de Indalo para agregar que “esto ha ocasionado que la empresa, que en su momento fue noticia por haber incorporado unidades 0 kilómetro, hoy se encuentre con serios problemas económico financiero”.
El vocero agregó que “estamos soportando una campaña de desprestigio en pos de otros intereses que difieron realmente de los que solicitan los usuarios del sistema, ya que si realmente el problema existe no es por culpa de esta empresa sino por el manejo político de las autoridades de la cual somos presos”.