| Los destrozos provocados por los piqueteros
terminaron de enfrentar a Néstor Kirchner con Beliz. El ex ministro
culpó a la SIDE de su alejamiento. Buenos
Aires (Télam) > El designado ministro de Justicia
y Seguridad, Horacio Rosatti, asumirá hoy el cargo al frente
de esa cartera en reemplazo de Gustavo Beliz, durante un acto que
se realizará en la Casa de Gobierno.
Rosatti, quien se desempeñaba como Procurador del Tesoro de
la Nación, y es un hombre de una estrecha amistad con el presidente
Néstor Kirchner, asumirá en un acto que se realizará
a las 17 en la Casa Rosada.
El relevo de Beliz y su reemplazo por Rosatti se produce a raíz
de las fuertes diferencias tras los incidentes de violencia ocurridos
hace 10 días frente a la Legislatura porteña.
Al respecto, el ministro del Interior, Aníbal Fernández
negó ayer que la remoción de Beliz evidencie una crisis
en el gobierno y manifestó que «los que así lo
interpretan es porque están acostumbrados a presidentes pusilánimes
que no se han animado a tomar decisiones de fondo».
En declaraciones periodísticas Fernández consideró
que «se trata nada más que de una decisión de
fondo del presidente» Néstor Kirchner.
El funcionario afirmó que Kirchner «toma las decisiones
cuando las tiene que tomar, independientemente de la conducta de los
ministros, porque entenderá que es mejor salida para la política
que está tratando de implementar en beneficio de los argentinos».
Kirchner designó además al actual Síndico General
de la Nación, Alberto Iribarne, como nuevo secretario de Seguridad
Interior, en lugar de Norberto Quantín, a quien también
relevó.
Los cambios fueron anunciados el viernes por la noche por el jefe
de Gabinete, Alberto Fernández, quien precisó que junto
a Beliz y Quantín dejarán su cargo todos los demás
miembros «del equipo» que ocupaba el edificio de Sarmiento
al 300.
Fernández formuló los anuncios pasadas las 22.30 del
sábado en la sala de periodistas de la Quinta de Olivos, junto
al vocero presidencial Miguel Núñez, y dijo que los
nuevos funcionarios asumirán en sus cargos hoy a las 17 en
la Casa Rosada.
Además, Fernández reveló que Kirchner le había
«reclamado» a Béliz la renuncia del secretario
de Seguridad, Norberto Quantin, antes de partir hacia Venezuela desde
Bolivia, el jueves pasado.
Por su parte, Quantin afirmó tener la conciencia tranquila
por «no haber desobedecido ninguna de las órdenes recibidas»,
en su carta de dimisión dirigida al presidente Néstor
Kirchner.
En tanto, Rosatti, quien asumirá hoy como ministro de Seguridad
y Justicia, fue intendente de la capital santafesina y uno de los
primeros dirigentes del PJ de esa provincia que apoyó la candidatura
presidencial de Kirchner.
“Se fue por sus expresiones”
Buenos
Aires (Télam) > El ministro del Interior, Aníbal
Fernández, desestimó ayer que la remoción de
Gustavo Beliz al frente del Ministerio de Seguridad evidencie una
crisis en el gobierno y manifestó que «los que así
lo interpretan es porque están acostumbrados a presidentes
pusilánimes que no se han animado a tomar decisiones de fondo».
Reveló además que «las expresiones» de Beliz
«hicieron definir” a Néstor Kirchner su reemplazo
y el de «todo su equipo».
El funcionario afirmó que, a pesar del recambio en el área
de Justicia y Seguridad, «las políticas en algunos casos
son específicas y definidas» por el Presidente, «y
van a seguir funcionando como tal».
Tras negar que el relevo de Beliz pueda caracterizarse como una crisis,
Fernández, en declaraciones periodísticas consideró
que «se trata nada más que de una decisión de
fondo del presidente» Néstor Kirchner.
Al respecto, el titular de la cartera política se preguntó:
«Si el Presidente hubiera decidido que Beliz no renunciara,
¿no habría crisis entonces?».
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