Se mantiene el alerta para Neuquén,
Chubut y Río Negro, a partir de mañana. Neuquén
> La tregua que otorgó ayer la lluvia a las poblaciones
de la zona cordillerana en Neuquén, Río Negro y Chubut,
tras una semana de fuerte temporal, permitió a algunas familias
retornar a sus hogares, aunque aún rige el alerta ante la posibilidad
de nuevas tormentas.
Si bien el sol apareció por momentos y trajo algo de alivio
a la región, el último parte meteorológico advirtió
que un nuevo sistema de frente frío del oceáno Pacífico
puede traer más lluvias y nieve a partir de la madrugada de
hoy. Pero además, el ingreso de un nuevo frente frío
para mañana provocará nuevamente precipitaciones en
el noroeste de Chubut, el oeste y centro de Neuquén y el oeste
y centro de Río Negro.
Autoridades de la provincia de Neuquén recorrieron ayer la
zona, en especial Villa Traful y Cuyín Manzano, mientras que
el viernes estuvieron en la zona de Junín de los Andes y áreas
rurales, como Chapalco, Pilo Lil y Las Coloradas. En algunos casos
la comitiva sobrevoló la zona y en otras accedió vía
terrestre. Se informó que algunas familias habían sido
evacuadas en Villa la Angostura y San Martín por temor a nuevos
derrumbes. El optimismo no era el mismo en cuanto al servicio eléctrico,
ya que en Villa la Angostura se había reestablecido menos del
40 por ciento.
En Chubut, cerca de 800 personas permanecían ayer evacuadas,
confirmó el gobernador provincial, Mario Das Neves, y aclaró
que todos los damnificados «están perfectamente contenidos
y sin problemas sanitarios».
En Río Negro, un cielo despejado con un sol radiante y la llegada
del avión Hércules a Bariloche con víveres para
los evacuados dieron ayer ánimo a las cientos de familias que
tuvieron que abandonar sus hogares. El gobernador Miguel Saiz y el
intendente de Bariloche Alberto Icare recibieron el cargamento enviado
por Nación, que será repartido en Bariloche, El Bolsón
y los parajes aislados de El Manso, Ñorquinco y Río
Chico. |