Familiares de la víctima aseguran
que los condenados sólo van a dormir a la prisión. Per
durante el día pasean por la ciudad.
Camodoro
Rivadavia (Télam) > Familiares de un hombre que
murió hace dos años en una comisaría de la ciudad
de Puerto San Julián, tras ser detenido y torturado, denunciaron
que los dos policías que fueron condenados por el crimen cobran
sus sueldos, salen a trabajar, visitan a su familia y sólo
duermen en la cárcel.
Mirta Almirón, hermana del albañil Ricardo Almirón,
asesinado el 3 de abril de 2002 en la seccional de Puerto San Julián,
explicó a Télam que la libertad de los condenados es
tan amplia que, incluso, llegó a toparse cara a cara con uno
de ellos en un banco, oportunidad en que éste le dijo: ¡Bingo..,
mirá a quién me vengo a encontrar!.
Según la mujer los dos policías de Santa Cruz, que fueron
condenados a 4 y 3 años y medio de cárcel por matar
a su hermano, «jamás cumplieron un día de la condena
que les impuso la justicia», lo que calificó como «vergonzoso»
y como «una burla a los familiares».
La mujer dijo que esos policías «cuentan con un permiso
especial para trabajar, visitar a sus mujeres cuando quieren y a la
alcaidía sólo van a dormir. Para ellos es como un hotel,
incluso han dormido con sus mujeres allí».
A raíz de estas circunstancias, Mirta Almirón dijo que
el año pasado presentó una nota ante el gobierno santacruceño
para informar de las salidas de los condenados a prisión, la
cual acompañó de nombres de testigos que pueden dar
fe de esa situación.
La condena
La mujer se refirió así a los efectivos César
Daniel Lara y Santiago Alcides Reyes, condenados, rspectivamente,
a 4 y 3 años y medio de prisión, más inhabilitación,
al hallarlos culpables de la muerte de Ricardo Almirón, ocurrida
el 3 de abril del año 2002 en Puerto San Julián.
La Justicia los condenó como autores del delito de «privación
ilegal de la libertad en concurso real con apremios ilegales en concurso
ideal con lesiones leves».
Según quedó acreditado en el juicio, el albañil
murió en la comisaría de Puerto San Julián «a
raíz de los golpes que le propinaron al menos cuatro policías»,
dos de los cuales (Lara y Reyes) fueron identificados por testigos.
Almirón había sido detenido cuando se dirigía
a su casa en bicicleta, momento en que fue agredido por los policías,
que lo colocaron en la caja trasera de una camioneta «golpeado
y esposado» y lo llevaron a la seccional, donde murió. |