Unas 22.300 personas resultaron afectadas,
entre las cuales 1.200 son daminificadas.
Santiago de Chile (Reuters) > Las personas afectadas
por las intensas lluvias en el sur de Chile aumentaron a 22.300, mientras
los damnificados suman ya 1.200, según un nuevo informe de
las autoridades locales.
Patricio Vallespín, gobernador de la Región de Los Lagos,
declaró ayer una la prensa local que aunque las condiciones
meteorológicas mejoran en la zona la situación sigue
siendo muy complicada por el aumento de las familias que requieren
ayuda.
Según su última evaluación, «hay 22. 286
personas afectadas, de diferentes magnitudes, con un total de 1.124
damnificados, especialmente en Valdivia, donde se concentran la mayor
parte».
«Hasta el día martes sólo vamos a estar con chubascos,
no con precipitaciones continuas y permanentes, por lo cual, obviamente,
comienza ya a bajar el nivel de las aguas, comienza un poco a volver
a la normalidad», comentó el gobernador de la Décima
Región.
Pérdidas
Explicó además que «las 49 emergencias viales
que tenemos en distintos lugares de la región ascienden a un
total de 2.700 millones de pesos (unos 4,5 millones de dólares)».
El jefe del gobierno regional agregó que el balance también
dio cuenta de que casi 600 viviendas sufrieron daños a raíz
de las fuertes precipitaciones que vivió la Décima Región,
de las cuales 12 tienen problemas de consideración.
Respecto de las soluciones habitacionales que anunció el jueves
el presidente Ricardo Lagos para pobladores de Valdivia, Vallespín
señaló que se logró constituir un aporte para
607 familias que estaban en los siete barrios carencias más
afectados por los temporales.
Dijo que eso va a significar que a través del Fondo Concursable
(Regional), previsto para efectuarse en agosto, ellos van a tener
prioridad y cupo asegurado.
Campaña
En tanto, la Cruz Roja Chilena comenzó ayer una campaña
de ayuda para las personas afectadas por las lluvias en Valdivia y
en otras zonas del sur del país. Patricia Acosta, coordinadora
de la institución, informó que el jueves partió
el primer camión con tres toneladas de frazadas, pañales
y ropa de cama que correspondían a un stock que mantenía
la entidad. |