Neuquén > El
debate por el reclamo salarial de los empleados municipales se reinstalará
esta semana en el Concejo Deliberante, bajo la atenta mirada del sindicato
que promete meter presión para apurar una definición
al pedido de incorporar las sumas no remunerativas ni bonificables
al sueldo básico.
A la propuesta del interbloque opositor de “blanquear”
lisa y llanamente las sumas, ayer se sumó la del concejal de
Recrear, Marcelo Bermúdez, quien plantea una salida por etapas
que permita distender el conflicto que enfrenta al Ejecutivo con Sitramune.
El edil consideró que en un principio deben reconocerse las
sumas como remunerativas pero no bonificables. Para ello, sería
necesaria la sanción de una ordenanza que defina explícitamente
el carácter no bonificable, es decir que no tiene efecto en
otros ítems como zona y presentismo. De esta manera, a los
empleados se les mejorará el sueldo bruto, pero no el neto.
Es decir, seguirán ganando lo mismo de bolsillo, pero “se
verá beneficiado con un mayor aporte para su jubilación”,
dijo Bermúdez. El costo para el municipio rondaría los
$ 2,5 millones anuales.
Razones
“Esto terminaría con una situación litigiosa
y en una segunda etapa se podría dar una discusión
salarial, pero atada a una reforma del estatuto”, señaló
el concejal, quien criticó el proyecto de ordenanza del interbloque
“porque es irresponsable y muestra un absoluto desprecio por
el presupuesto municipal”.
Desde la oposición, el frentista Carlos Di Camillo dejó
en claro que un eventual “blanqueo” de las sumas, no
debe alcanzar a los cargos políticos, tal como está
contemplado en las simulaciones que envió el Ejecutivo. “De
ninguna manera vamos a aceptar que el proporcional se traslade a
los sueldos políticos”, remarcó Di Camillo.
En el MPN prima la cautela, habida cuenta que de los ocho votos
del bloque depende cualquier decisión que se tome, aunque
la bancada ya dejó en claro que el pago de sumas no remunerativas
ni bonificables es ilegal. |
Con información regional de Neuquén y Río Negro 
