Buenos Aires > La Red de Mujeres Solidarias y la Unión de Empleados de la Justicia de la Nación (UEJN) expresaron ayer su apoyo y «beneplácito» por la postulación de Carmen Argibay como miembro de la Corte Suprema de Justicia, y resaltaron sus «altas condiciones humanas y éticas» para ocupar ese alto cargo en uno de los poderes del Estado.
«A pocos días de que cierre el período para que las asociaciones de profesionales y académicas presenten sus observaciones sobre ella, como Red de Mujeres Solidarias queremos manifestar públicamente nuestro apoyo a la candidata» Argibay, señalaron las mujeres en un comunicado.
En la nota señalaron que «esta decisión no depende sólo de que sea una mujer la que ocupe un lugar en la Corte (si bien aplaudimos ese hecho y también apoyamos a Argibay en su visión de que sean más mujeres las que se incorporen), sino que se debe a que justamente rescatamos de Carmen Argibay aquello que para otros curiosamente resultan acusaciones».
«En un país en el que las mujeres humildes siguen siendo las más marginadas, cuando a la pobreza se le suma la violación de sus derechos como mujeres, no podemos sino brindar todo nuestro apoyo a quien, como Carmen Argibay, a punto de ocupar un cargo de tanta responsabilidad -y teniendo en cuenta además los intereses antipopulares y conservadores que la vieja Corte ha defendido durante tantos años-, sigue levantando lo que para nosotras son motivos de lucha cotidiana», remarcaron.

Piumato
Por su parte, el titular del gremio de los trabajadores judiciales, Julio Piumato, opinó que Argibay reúne los «valores académicos» que la función requiere, así como «los requisitos morales y de compromiso con los valores que los argentinos debemos recuperar para vivir con dignidad». «Por ello, consideramos acertada la propuesta realizada por el Presidente de la Nación (Néstor Kirchner) y no dudamos que será un hito importante», aseguró.