Medidas contra inseguridad Se pondrán más exigencias a los comerciantes que quieran vender bebidas alcohólicas. Colocarán cámaras de video en la zona del microcentro. Los locales bailables son obligados a cerrar a las 6. Se están revisando todas las licencias otorgadas a los boliches. A los que no cumplan con medidas de seguridad, se les quitará la habilitación. La Universidad del Comahue quiere capacitar a los patovicas. Habrá trabajo conjunto provincia-municipio en los sectores críticos.

NEUQUEN.- La política que pregona el gobierno municipal de mano dura y tolerancia cero con los comercios que venden bebidas alcohólicas a menores o fuera del horario permitido, ya comenzó a cristalizarse en propuestas concretas.
Esta semana aterrizará en el Concejo Deliberante un proyecto que prevé la creación de una licencia especial para los comerciantes que quieran vender este tipo de bebidas y además aumenta las exigencias que deberán cumplir quienes las comercialicen.
Incluso, aunque no está contemplada en la iniciativa que presentará el Ejecutivo, ya se habla de la posibilidad de cobrar una habilitación más cara a estos comercios.
La propuesta se presentará como un medida tendiente a prevenir la proliferación de hechos delictivos, situación que por estos días mantiene en vilo a todo el arco político de la capital.
El subsecretario de Desarrollo Local, Alejandro Vidal, explicó que la licencia especial que se pondrá en marcha en todos los casos será otorgada con carácter de provisoria.
Además, quienes desarrollen la actividad comercial en un local alquilado, tendrán que presentar una autorización del propietario que apruebe expresamente la venta de bebidas alcohólicas.
Los comercios habilitados para el expendio, tendrán que cerrar sus puertas indefectiblemente desde las 23 a las 8 del día siguiente. Las rotiserías serán una de las excepciones ya que podrán permanecer abiertas una hora más pero sin vender alcohol.

Multas

Para garantizar el cumplimiento de la normativa, el Ejecutivo fijó fuertes multas para los transgresores a quienes el Tribunal de Faltas les podrá aplicar sanciones económicas que irán desde los $5 mil a los $30 mil.
Además, en caso de que el comercio caiga en infracción, el municipio podrá decidir la clausura provisoria, el retiro de la licencia comercial y también el decomiso de la mercadería.
Sobre la posibilidad de implementar una tasa especial, mucho más cara para quienes quieran vender bebidas alcohólicas -similar a la que impulsa el gobernador Felipe Solá en Buenos Aires-, Vidal señaló que «si bien no está incluida en el proyecto, es una de las posibilidades que se debatirá con los concejales».
En la reunión multisectorial que se realizó el miércoles pasado en el Concejo Deliberante para debatir la problemática de la inseguridad, los funcionarios municipales anticiparon el contenido de la ordenanza que ahora será elevada formalmente.
«Con esta propuesta queremos dar el puntapié inicial y abrir el debate sobre una cuestión que no es sencilla de controlar», dijo Vidal. En ese sentido, en la fundamentación de la ordenanza se reconoce que la actual legislación «no es eficaz a la hora de llevar adelante los controles que ella impone» y se advierte que «la ingesta de bebidas alcohólicas sigue incrementándose con graves consecuencias sociales».