Por Fernando Barraza

NEUQUEN.- Supongamos que en la vida todo es más que tener una buena idea, y que esa masa de proyectos a los que sencillamente solemos llamarle «las cosas» cuestan mucho más trabajo que tirar una buena idea a la cancha. Supongamos que es así, que los pragmáticos seres que dominan este planeta tienen razón, y que las ideas son sólo ideas; aún así lo de esta gente es simplemente una buena idea.
Pero la simpleza -ultimamente traída a colación con un tono siempre despectivo- en esta idea es un atributo fundamental, esencial, casi excluyente: siete escritores, integrantes fijos de una cooperativa en formación («y muchos ‘satélites’ que nos ayudan en esta empresa», según dicen ellos) se han animado a darle vida a «Limón», una nueva editorial que se encargará de editar libros de autores inéditos de la región. «No son solo poetas, si bien los tres primeros libros serán de poesía -dice Victoria Cocconi, una de las integrantes de este nuevo grupo de «siete locos»-, estamos en tratativas para que también se incluyan prosistas, fotógrafos, artistas plásticos y otros artistas que quieran editar sus cosas».
Reunidos cada vez más periódicamente, porque las exigencias de la empresa así lo amerita, los siete locos ya planifican su primer asalto para el domingo 6 de abril, cuando en la Conrado Villegas hagan la presentación de los tres primeros libros de la editorial: «Brote», de Martina Cianis, «Tírese suavemente» de Victoria Cocconi y «Barda brava» de Oscar Castelo. No es todo: «mientras estos libros salen a la luz -dice Andrés Kurfirst, otro loco-, dos libros nuevos ya están en etapa de producción y serán presentados en los primeros días de junio, son ‘Azar y Preludio y fuga’ de Mariela Lupi y ‘Esencia alquimia’ de Angela Jerez». Por lo visto, este Limón será duro de roer.

Es importante

Ellos hablan con pasión y fuerza de trabajo sostenida de «esporas (libros) que se esparcirán en una tierra de vientos (ésta, claro)», de «escribir sobre la invisibilidad en un planeta en el cual la realidad es eso que nos dicen, y no las infinitas realidades que componen esa realidad que nos quieren hacer creer» y otras sabrosas metáforas... ¿o realidades?. Usted decida.
Ellos creen que «la poesía es producto de los márgenes», al menos eso es lo que enfáticamente señala Kurfirst, y todos están de acuerdo con él en que será esencial que los libros de limón estén en bibliotecas y escuelas de la región.
Sí, son locos, pero no «están locos», que es la frasecita que al refutador básico de mitos y leyendas cotidianas le encanta emplear para desmerecer cualquier trabajo que no tenga nada que ver con los sondeos de mercado mencionados párrafos más arriba. Permita entonces que se introduzca el listado completo de estos (primeros) locos en esta nota. Identifíquelos, sepa que no cesarán en su locura, por ser y no por «estar»: Andrés Kurfirst, Victoria Cocconi, Martina Cianis, Mariela Lupi, Angela Jerez, Darío Aguirre y Oscar Castelo. Si a usted le duele la birome de tanto manchar páginas de cuadernos o ya no le resisten las yemas de los dedos de desblanquear documentos de word con lo que siente, comuníquese ya con ellos al mail editoriallimon@ yahoo.com, o llámelos al 4464776. No deje que pase más tiempo, el limón es espora y se esparcirá.
Por último sepa algo muy importante: el trabajo que ellos ya están realizando (dure lo que dure) es mucho más importante que el de mucho cuerdo de traje que está convencido de estar entrando en las páginas doradas de la historia de esta tierra. De eso -por más locura que haya flotando en el ambiente- no cabe ni la menor duda.