CIPOLLETTI.- Una denuncia pública por la presunta existencia de patotas juveniles entre los estudiantes de un conocido colegio céntrico, formuló ayer una mujer, que dijo que su hija de 13 años fue golpeada días atrás por miembros del grupo «Las Cachorras». En el incidente también habría recibido golpes, y de mayor ferocidad, una amiga de la chica. El episodio será investigado ahora por las autoridades escolares.
La supuesta agresión ocurrió el lunes, alrededor de las 18.30, a la salida de clases del turno tarde. El escenario fue la vereda de calle Miguel Muñoz, casi con la esquina de Yrigoyen, a unos pocos metros del Colegio Manuel Belgrano, donde estudiarían las agresoras y sus víctimas.
Mabel Pereyra es madre de Lucía, una de las alumnas atacadas por cinco integrantes de «la patota de Las Cachorras», manifestó la mujer. La chica concurre al segundo año turno tarde y con una compañera, de 14 años, recibió el embate de la presunta patota. «A mi hija le dieron un golpe en la cara, pero la que recibió muchos más golpes fue su compañera. Le pegaron, le tiraron del pelo y la zamarrearon», puntualizó.
Pereyra concurrió después al colegio a denunciar ante las autoridades la conducta de «Las Cachorras», que tendrían una actividad permanente y actuarían muy unidas, al igual que otros presuntos grupos de malas juntas. «No es la primera vez que ocurren casos así en la escuela», enfatizó.
La progenitora formuló la denuncia respectiva en la vicedirección del establecimiento, desde donde se prevén adoptarse medidas para poner punto final a las presuntas actividades de patotas. Indicó que se prevé convocar para una reunión del consejo de convivencia, que son la instancia tradicional que rige en los colegios para dirimir problemas de relación y conducta de los alumnos.
Pereyra no descartaba ayer realizar también una denuncia policial, para evitar cualquier inconveniente futuro. Expresó que su hija no interviene en los grupos de alumnos que existen en el colegio y enfatizó que «me molesta mucho la situación» que observa entre los estudiantes. Dijo tener reconocidas ya a tres de las chicas agresoras, las cuales tendrían residencia en el barrio de las 1400 Viviendas y en las 1200 Viviendas.