GRAL.ROCA.- Dos asaltos
a plena luz del día se registraron ayer en esta ciudad, escogiendo
los delincuentes blancos idénticos: repartidores de firmas
comerciales.
El primer hecho fue notificado a la comisaría Tercera a las
10.45, y los datos preliminares indican que dos personas que iban
a bordo de un camión repartidor de la empresa «Soda
Pablo» fueron interceptados por dos jóvenes armados.
Es el enésimo asalto que sufre esta empresa, y esta vez el
repartidor fue abordado en Alsina y Piedra Buena, justo en el límite
entre barrio San Martín y Villa Obrera. El empleado habría
asegurado a la policía que -luego de ser encañonado
con un arma de fuego- le sacaron unos 100 pesos, pero que no recibió
lesiones. Tampoco su «acompañante» que -según
las fuentes- podría ser un vigilador.
Puestos a recoger testimonios, los efectivos de la policía
tuvieron firmes indicios de que un tercer individuo participó
en el asalto.
Tres horas más tarde, y en la otra punta de la ciudad, fue
abordado por dos jóvenes desconocidos y armados y distribuidos
de aceites. Aquí actuó personal de la Subcomisaría
67 de Stefenelli.
El atraco se habría producido cuando el vendedor se encontraba
en calle La Plata al 1400. Los dos jóvenes iban armados y
a punta de revólver le sacaron algo de dinero y un teléfono
celular. Hasta el cierre de esta edición no se habían
registrado detenciones vinculadas con estos hechos, aunque los policías
de Stefenelli realizaron un procedimiento exitoso al secuestrar
una camioneta Toyota roja. Comprobaron que todos sus papeles estaban
en situación irregular. El rodado -patente WYT 272-, quedó
a disposición de la justicia.
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