BUENOS AIRES.- El Gobierno dejó en manos del Congreso la definición del mecanismo de compensación a los bancos por el dinero retirado del corralón financiero vía amparos judiciales y la indexación asimétrica, pero definió por decreto que las entidades paguen los redescuentos otorgados por el Banco Central con títulos públicos, a cambio que expandan el crédito al sector privado.
«Las compensaciones a los bancos por la pesificación asimétrica y por los amparos serán decididas por el Congreso Nacional para lo cual se enviará un proyecto de ley», dijo ayer a la tarde el ministro de Economía, Roberto Lavagna, al anunciar la normalización del sistema bancario, lo que incluyó el fin del corralón financiero.
Lavagna, en conferencia de prensa, explicó que la iniciativa enviada al Congreso propugna que la compensación por el retiro de fondos del corralón vía amparos «se hará efectiva cuando se produzca la sentencia judicial definitiva».
En tanto, en el caso de la indexación asimétrica -diferencia entre el CER y el CVS- la norma impulsa la compensación «sobre la cartera de los bancos que esté vigente, sin previsiones por incobrables, y disminuyendo eso en un 5 por ciento en concepto de recobrabilidad».
El ministro se abstuvo de opinar sobre la celeridad con que el Congreso se abocará a este tema, tan ansiado por los bancos. «No podemos asumir las responsabilidades de otros poderes del Estado», dijo Lavagna al ser concultado al respecto, en compañía del secretario de Finanzas, Guillermo Nielsen, y el subsecretario de Financiamiento, Leonardo Madcur.
Además, el ministro anunció que por decreto se establecerá un mecanismo para que los bancos paguen el stock de redescuentos, préstamos otorgados por el Banco Central a entidades y que suman unos 20.000 millones de pesos, a través de calzar los vencimientos de títulos públicos que tienen las entidades en sus carteras. Esta cancelación se realizará en pesos ajustados por el CER, a una tasa de interés anual del 3,5 por ciento y a un máximo de 70 cuotas, pero a cambio los bancos «deberán ampliar su cartera de créditos al sector privado».